domingo, 22 de abril de 2012

Picaduras de arañas desde el Salento

Nidi D’Arac
Taranta Contanider
Tarantulae, 2010

Los ritmos étnicos, como los llama el gran Jose Migel López, alma del programa de Radio3 “Discópolis”, evolucionan al compás de las nuevas tecnologías, de las mezclas, partiendo siempre de un rico patrimonio lingüístico, rítmico y melódico.  Ese es el caso de Nidi D’arac, un grupo de reciente descubrimiento que hunde sus raíces en el sur de Italia, en el Salento.


La taranta tiene algo hipnótico, que si se une a las bases electrónicas alcanza un trance más allá de lo imaginable.  Una especie de salmodia que nos golpea en la forma más visceral de escuchar música y nos provoca claros efectos secundarios: no podemos evitar cimbrearnos, contorsionar nuestros cuerpos y nuestras mentes en un gozo abandonado.  Sin embargo, esta exploración también tiene pecados, como en “Gocce”, con un ritmo demasiado simplón, casi eurovisivo. Otras opciones, como “Matinata”, resulta más cercana por ser de origen tradicional.  Buena forma de sumergirse en experiencias sonoras menos exploradas en España pese a la cercanía.

Dejarse llevar es el mantra de esta picadura de araña.

jueves, 19 de abril de 2012

El "método cardiofónico" de Germán Díaz

Germán Díaz
"Método cardiofónico", 2012

La nueva aventura en la que se ha embarcado el gran Germán Díaz supone un ahondamiento en la creatividad a la que os tiene acostumbrados.  Un paseo por la improvisación que desata un verdadero “McGuffin” como son las grabaciones que el Dr. Iriarte hizo de corazones de pacientes para enseñar a sus alumnos cómo sonaba un corazón con una cardiopatía.  Y lo hace con su habitual despliegue de la “cacharrería” que le mantiene fascinado desde pequeño y que se refleja de forma tan evidente en su taller, mezcla de desván, taller de luthier y almoneda del Rastro madrileño.


Su labor de investigación revela un pensamiento musical completamente divergente, que es capaz de aunar en un mismo tema la sensibilidad repetitiva de una caja de música con la tecnología que le permite grabar y reproducir ritmos e improvisaciones sobre la que construir el edificio de su preocupación sonora.  Un quehacer completamente artesanal en la creación de los cartones perforados que le permiten tocar sus instrumentos de manivela, como la caja de música o el órgano de barbaría.

¿Llamaríamos a esto “jazz”? Algunos de los sonidos y ritmos que utiliza, algunas síncopas nos conducen hasta él, no en vano una de las formaciones en las que encontramos a Díaz es la Parrús Dixie Band donde toca el clarinete o el extraordinario dúo con Antonio Bravo (Brigada Bravo & Díaz) que abordan el cancionero de la Guerra Civil Española con guitarra y zanfona donde podemos encontrar el famoso “Take a five” por debajo de alguno de sus temas.  ¿Debemos colocarlo en el elenco de la música clásica contemporánea? La verdad es que también podríamos a juzgar por el trabajo de música medieval de la agrupación Tasto Solo.  No vamos a decir nada de la relación con el folclore por motivos evidentes. 

Lo mejor que podríamos hacer tras escuchar este “Método cardiofónico” sería grabar nuestros propios latidos y descibriríamos que danzan al son de una zanfona.